martes, 4 de junio de 2019

VENGANZA INFINITA. Capítulo 58

De mal en peor.
Randy llegó a la clínica. Cuando detuvo la monto Oliver cayó al suelo, pidió ayuda para buscar una camilla.

Randy se asustó, Oliver estaba muy amarillo e hinchado.
-¡Por favor ayúdenme! -Randy estaba desesperado y acompañó a los camilleros. Entraron a emergencia y lo ubicaron en un cubículo.
-Su médico está en esta clínica, ya le digo el nombre.

Randy aprovechó que se quedaron solos, movió el parabán para ocultarse de los demás.
-Te voy a curar mi pana. -Oliver apenas podía ver a Randy, lás lagrimas le corrían sin esfuerzo.
-Bernardo...Bernar...do, llama a Bernardo.
Tomó su celular y lo llamó pero no contestó. Se concentró, intentaba comunicarse con Bernardo pero no lo lograba. Su mente viajaba pero las señales no llegaban.
-Cálmate, cierra los ojos. -Le dijo a Oliver, puso sus manos sobre el abdómen del muchacho. Una luz iluminaba su cuerpo e iba irradiando el cuerpo de Oliver. Cerró sus ojos y comenzó a sentir calor.
-¿Qué pasa aquí?  Salga, no puedes estar en la emergencia, espere afuera.
Un médico y una enfermera lo invitaron a salir del área de emergencia.

Esperó en la recepción cuando vio llegar a Bernardo.
-¿Qué pasó con Oliver?
-Lo traje a la clínica pero al llegar se desmayó, estaba muy débil.
Bernardo lo tomó del cuello de la camisa.
-¡Te llevaste a Kimberly y ahora me quieres quitar a Oliver tambíen! -Lo empujó contra la pared.
-Señores le voy apedir que abandonen la clínica.
El vigilante estaba detrás de Bernardo, este soltó a Randy, vio una cartelera. <Si usted lo ha visto o tiene información de su paradero, comuníquese al 0-800 arresto>

La enorme cartelera cayó al piso haciéndose añicos el vidrio, desvaneció la foto en la que salía su rostro.
-¿Qué coño haces?

Salieron de la clínica dejando a varios empleados y al vigilante recogiendo el desastre de la cartelera.

-Había una foto mia en la cartelera. Me están buscando. 
-¿Y por qué me tienes que maltratar?
-Es por lo de Oliver.
-Intenté hacerle imposición de manos y...
-Yo lo hice y no pasó nada.
-Me interrumpió el médico. Está muy mal.
-Vamos a hablar con el médico.

-Hay que drenarlo para que baje la hinchazón y desintoxicarlo, pero...no se puede tratar con quimio o radio...podemos buscar alternativas para que tenga una calidad de vida mejor. Bueno, menos mal.
-Algo se podrá hacer.
-Claro que sí, pero el final ya lo sabemos.
Bernardo volvió a desesperarse y cogió al médico por la bata.
-¡Usted lo va a salvar!
-Suélteme, yo haré todo lo que esté a mi alcance pero salvarlo...no puedo asegurarlo.
Bernardo le dio un golpe en la cara y Randy lo tumbó al suelo dejándolo dormido.
-¿Está bien doctor?
-Si, pero llévese a su amigo de aquí o llamo a la policía. Oliver se va a quedar hospitalizado 24 horas más.

Randy despertó a Bernardo.
-Te voy a joder.
-¿Cómo se te ocurre pegarle al doctor? ¿Tás loco?. Oliver se queda hospitalizado hasta mañana.
-Yo tengo que entrar a la clínica a revisar cada piso y eliminar mi foto.
-Te van a ver.
Bernardo cambió su aspecto. Ahora era el médico de Oliver. Entró a la clínica.

Día y medio después Oliver salía de la clínica junto a Bernardo. Estaba sorprendentemete muy bien, con ánimo, fuerza y físicamente se veía sano.

-Randy creo que me curó. Me siento muy muy bien.
-No te curó y no lo hará, aqui te repotenciaron y tu médico te curará.
-¡Yo me siento bien! Eso es lo que me importa. Mira ¿y ya tiraste con Kimberly?
-No, pero esta semana me veo con ella. Yo creo que nuestro encuentro va a ser el definitivo para que regrese con nosotros.
-¿Con nosotros? Bernardo...yo...yo no voy a regresar contigo, yo me regreso a mi apartamento.
-¿De qué estás hablando?
-Voy a darle una oportunidad a Randy.
-¿Qué coño te pasaron por la vía? ¿De qué carajo me hablas? ¿Te volviste loco?
-No, se ha portado bien conmigo.
-Es, tiene los mismos poderes que yo.
-Pero no ha matado a nadie.
-¿Te lo dijo él? No...ya va...tu me estás jodiendo, no puedes estar hablando en serio.
-No me voy a empatar con él. Voya darle una oportunidad.

Llegaron al edificio de Oliver.
-¿Que hacemos aquí? Tengo que buscar mis cosas en tu casa.
-Tu no vas a vivir más nunca en tu vida aquí.
-¿Me vas a secuestrar?

Bernardo vio a Oliver a los ojos mientras un estruendo y una enorme nuve de polvo estremecía los alrededores, ellos a dos cuadras del edificio observaban como se desplomana el edificio mientras los gritos de la gente eran ahogados por el ruido del edifició en caída.

Oliver comenzaba a llorar, son esfuerzo, las lágrimas corrían por sus mejillas. Se desmayó en el asiento. Bernardo encendió el carro y se fueron del lugar.


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