miércoles, 16 de octubre de 2013

PECADO CAPITAL 5. Soberbia


Ya montados en la camioneta África le pregunta a Tabay el por qué de la prisa, –yo quería disfrutar del in de semana completo–Tabay le da un cachetada –¿Coño no viste que mataron a mis escoltas? ¿Qué querías que nos mataran a nosotros también? Bueno que te maten a ti no me importa, gran vaina se va a perder–¿Por qué me tratas así, que te he hecho para que estes así conmigo–Cállate la boca no me hables– y volvió a darle otra cachetada. Potro los había seguido hasta la playa en una camioneta blanca de vidrios tipo espejo –de su propiedad que Tabay no sabía que la tenía–Llegó, vió a los escoltas, conversó con ellos y los mató a cada uno con un tiro en la cabeza.



Sin hablar durante el camino, Tabay iba a toda velocidad hasta que se da cuenta que una camioneta blanca se acerca rápidamente hacia él y sin poder reaccionar embieste a su camioneta hasta hacerla perder el control y salir se del camino chocando con las defensas. La camioneta blanca sigue su camino a toda velocidad.



En la la playa se quedaron Atabapo y Tobago. –Voy a la posada un momento nene, ya regreso, ¿quieres algo de tomar?–No, gracias yo te espero aquí, me voy a bañar. Atabapo entra a la habitación y se dirige al baño, abre la puerta y se encuentra a un hombre negro sentado en la poceta. –Ay curita, tú no aprendes...yo te dije que no te metieras con mi putico y aquí sigues– Se levantó bruscamente y agarró a Atabapo por la cabeza. –Te lo dije mamaguevo que te volvía a vé’ con mi putico y te mataba– Lo tenía ahorcado y lo lanzó a la cama y comenzó a darle golpes, uno detrás de otro–El putico es mio mamaguevo, es mio nojoda, cabrón de mierda–y seguía golpeándolo. Cuando comenzó a ver que tenía sangre en la cara entró Tobago, –¿¿QUÉ HACES COROMOTO??–el motorizado se detuvo y agarró por el pelo a Tobago mirándolo con cara de rabia. –¡Te voy a matá carajito! Eres una puta, ¡te dije que más nadie te iba a cogé’ sino yo!.

Tobago agarró su bolso y Coromoto lo sacó del cuarto arrastrándolo,–Móntate en la moto que nos vamos–Antes que se montara lo abrazó y le dió un beso en la boca–la próxima te mato a coñazos carajito–. Salieron a toda velocidad del pueblo dejando a Atabapo inconsciente.



Tabay reaccionó unos minutos después del choque y vió que África estaba desmayada y con una herida en la cabeza, se acercó a ella, abrió la puerta y la lanzó de la camioneta, logró encenderla y se fue de ahí dejando a África tendida en el piso



***

Tres días después, África estaba en su casa recuperándose con un brazo enyesado y cinco puntos de sutura en la cabeza. Atabapo también hospitalizado con fractura de naríz y pómulo y varias contusiones en la cabeza que requerían chequeo.

Tabay estaba en su casa descansando, cuando rcibe una llamada… “Mi amor vente ya para mi casa, es importante y urgente“ –¿Pero tienes ques er ahora?– “Si, te interesa, vente con Potro“.

–Potro, Potro, Potro, que voy a hacer contigo carajo, casi me matan, despachan a mis escoltas y tú no apareces...no te mao porque eres mi hombre de confianza y mano derecha. Ahora serás mi escolta personal–Así será jefe–dijo Potro mientras torcía la boca con una sonrisa de maldad.

–Me vendiste a Tabay Guanta, eres una sucia, pero no me van a joder–Tú no vas para ningún lado–Lo apuntaba con un arma. En ese momento se abre la puerta del apartamento. –Caramba mira quien tememos aquí, el que se coge a mi novia–Y tú te coges a la mía, así que estamos parejos–Potro le lanza un golpe que lo tumba al suelo.

–Eres una maldita, me van a matar por tu culpa, perra–Tabay lo levanta del suelo por el cabello.–No chico, si yo not e voy a matar, ahora vas a trabajar para mi. Serás uno de mis matones, despacharás al que yo te diga–Yo no voy a matar a nadie, no soy un asesino–Lo serás, Potro te va a entrenar y hoy vas a matar a dos persona jeje, llévatelo para que empiece a ser un hombrecito y se le quite tanta bondad de mierda que tiene en la cabeza.



–¿A quién va a matar este niño?–Mi amor no me eches la charla, quiero hacerte el amor, no sabes quienes son las víctimas, asi que relájate y dame lo que quiero–. Guanta empujó a Tabay en la cama y le quitó los pantalones, agarró unas tijeras y se montó encima de Tabay –¿Qué vas a hcer cones? Mosca mi amor, mosca que eso nos on juegos–Shhhh, calladito que no voy a ahcer nada que no te guste– Metío la tijera entre la piel y el interior y rompió la tela. –Verga, que perrita eres, mama–Guanta comenzó a mamar suave, bajaba hasta la base del pene y se retiraba, en una de las veces que lo introdjo en su boca comenzó morderle el pene con bastante presión –Me duele cariño, no tan duro–Aguanta, pareces una niña, todavía no muerdo duro–y clavó sus uñas en los testículos, lo que hizo que Tabay gritara del dolor, pero ella seguía mordiendo el pene y Tabay se excitaba y ella mordía.

Con su lengua se paseaba por todo el cuepo del pene mientras seguía mordiendo, hasta que Tabay no aguantó y derramó su semen en la boca de la mujer ella no lo tragó sino que se levantó y le escupió todo el líquido en la cara de Tabay y le soltó una fuerte cachetada. Se levantó y comenzó a vestirse.

–Te me estás poniendo muy eyaculador precoz últimamente, vamos a ver si te corriges eso, no me está funcionando así–Pero, pero mi amor no me dejes así vamos a esperar un ratico para cogerte, ¡no te vayaaaas!– Un portazo y todo quedó en silencio.


Potro y Falcón llegaban a la casa de este. –¿Qué vamos a hacer de mis padres, para que me tráes aca?–Abre la puerta y haces lo que te digo–Dijo Potro con frialdad. Hijooo ¿cómo estás? que sorpresa ¿vienes a comer? ¿y el señor? ¿un amigoSiéntese señora–Potro sacó un arma y se la dió a Falcón –mátalos–¡¡¡NOOO!!! ¡¡¡¿¿¿ESTÁS LOCO???!!!– Potro le tomó de la mano junto con el arma, puso el dedo de Falcón en el gatillo –Primero las damas–apretó y disparó, un tiro certero en la frente. –Ahora a tu padre–Misma acción y el padre cayó tendido en el piso. Falcón quedó paralizado, y las lágrimas salían solas. Potro lo volteó y le dió un fuerte golpe en la cara. –Vámonos, que tenemos mucho que hacer, esto sólo es el comienzo–

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