AMOR EN TINIEBLAS 4. Final de Temporada

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Domingo 7:30 am

-Rolo e coñaza que te dió el malandro ese jejeje, si quieres dejamos lo del psiquiátrico pa’ la semana que viene.

-No mi amor tranquilo, yo estoy bien, en un rato nos vamos, vente, vamos a desayunar. Le dijo Ernesto a Ricardo.

10:06 am

-Verga Ernesto pero este psiquiátrico está en ruinas…¿los cuidan bien aquí?

-Si vale, nada que ver como está adentro, la fachada es la que está en ruinas, me imagino que es para estar de bajo perfil. Efectivamente, internamente todo era impecable, nuevo, oficinas bien cuidadas, computadoras, vigilancia, todo automatizado.

-Si lo sé, pero es que no pude venir ayer…me asaltaron y necesitaba venir hoy, tanto para ver a mi esposa como para pagar la cuota.

-Pasen, solo por esta vez lo dejo pasar, hoy no hay visitas de ningún tipo, su esposa está un poco mejor, ya se comunica con nosotros, no mucho pero va avanzando. Entraron al cuarto, apenas Gisela lo vió, lo abrazó.

-Sácame de aquí, llévame a ver a mi hija, ¿dónde está mi hija?, sácame de aquí.

 Ernesto la separó y le dió un beso en la boca.

-Pronto mi amor, pronto te llevaré a verla.

Ricardo veía a Gisela y no podía creer lo acabada que estaba y lo trastornada que se encontraba. ‘Y la doctora dice que va avanzando…¿cómo estaría antes?’ pensaba.

10:52 am

-Bueno mi amor, nos vamos, regreso pronto y con buenas noticias, ahí te dejé los libros, pero los lees ¿ok?

-Chao Gisela, gusto en verte -le dijo Ricardo.

Al llegar a la puerta Gisela le grita.

-¡Ernesto, mírame a la cara! -el volteó y ella lo apuntó con la pistola, descargando 5 balas en su cuerpo. Mientras Ernesto caía al suelo, Gisela metió la pistola en su boca y disparó. Ricardo quedó en shock al ver la escena; Gisela muerta con el cráneo destrozado y Ernesto agonizando.

-Mi amor, aguanta, UNA AMBULANCIA POR FAVOR, HAY UN HERIDO. Las alarmas sonaron, llamaron a la policía y a una ambulancia.

-Aguanta amor, aguanta.

-Te a…a…amo Rodo, te amo.

-No te puedes morir por favor, hoy te iba a pedir que te mudaras conmigo, no me dejes tú también, no me dejes…

Ernesto quedó tendido en el piso sin vida…

-NETO NO, NOOO, NO ME DEJES AQUÍ, NO ME DEJES, no me dejes neto…no te vayas, no te vayas, no te vayas…Mientras repetía eso seguía llorando.

-Dios que desgracia, ¿por qué te lo tenías que llevar? ¿Por qué, por qué?.

Martes 5:35 am

El titular que toda la alta sociedad caraqueña leía la mañana del martes: “Han fallecido trágicamente el reconocido abogado Ernesto Alcántara y su esposa Gisela de Alcántara…todo hace pensar que fue un crimen pasional. Comienzan las investigaciones del crimen de una de las parejas más conocidas en el ambiente judicial del país”.