Jueves 9:05 am
El cementerio estaba lleno en el área del velorio. Por
insistencia de Federico pidió permiso en la clínica para ir al entierro, se
sentía mal pero ‘quiero estar ahí para
verlo por última vez y muerto’. decía en su mente.
Vicente fue a abrazar a su hermano Ricardo, un abrazo
sentido que hizo que Ricardo rompiera a llorar desconsoladamente, se sentía
solo, sin sus dos mejores amigos y alejado de su hermano. “¿Qué hace Federico
aquí? que ni se acerque…” “Tranquilo Rodo, el se va a quedar ahí”.
“¿Fernanda? ¿Tú le avisaste Vicente?” “No, ni idea que hace
aquí”.
“Hola Vicente, hola Rodo…siento mucho lo de Neto” lo abrazó
fuerte, sus pechos casi al descubierto por el pronunciado escote negro rozaban
los gruesos vellos del pecho de Ricardo que llevaba la camisa, sin darse cuenta,
con 3 botones abiertos, algo que erizó a Fernanda. Se separaron pero ella se
quedó a su lado, Vicente al otro lado de su hermano.
“Disculpen un momento, voy al baño” dijo Ricardo. Federico a
lo lejos lo observaba y decidió ir al baño, caminando despacio. Ricardo terminó
de orinar, se lavó las manos y se metió una buena cantidad de coca. Entraba
Federico.
-Lo siento mucho Rodo
-¿Qué coño haces aquí? ¿A qué viniste? ¿A ver si Ernesto seguía
vivo y matarlo tú? -Lo empujó contra la pared sujetándolo de la camisa y el
saco-.
- Me estás haciendo daño.
- Más del que me has hecho tú a mi no creo Federico, no lo
creo -Le fue a dar un golpe en la cara, se detuvo, lo miró fijamente a los ojos
por unos segundos y lo besó en la boca por unos segundos… Vete de aquí
Federico, vete.
“¿Qué hacías tú en el baño con Ricardo?” dijo Vicente. “Nada
mi amor, quería darle el pésame pero no me dejó”. Ricardo llegó al recinto
nuevamente y estaba algo eufórico, se abrazó de nuevo a Fernanda.
Rodo, disculpa todo lo malo del pasado, sé que no nos
llevamos bien, pero creo que es momento de limar asperezas, ¿no crees? ‘y de que me lleves a tu cama a disfrutarte’
“Tranquila cuñadita, estas perdonada ¡y estas buenísima por cierto! Mi
hermano tenía mala mano jejeje y le dió un beso en la boca. A lo lejos Vicente
veía lo que acababa de pasar y le entró la rabia en el cuerpo. ‘Lo sabía, a Fernanda le gusta Rodo que puta’
dijo en voz baja Vicente. “¿Quién será esa perra que besa a Ricardo?” Le
preguntó Federico a Vicente.” Es mi ex y si, es una perra” dijo Vicente.
“Pues tu ex se lo quiere tirar, eso está clarito, mira la
actitud, de ofrecida y encima con ese escote en un funeral, esa está buscando
que se lo entierren a ella” “¿Te puedes callar Federico?” le reclamó molesto
Vicente.
11:35am
“¿Quieres que te acompañe a tu casa? No es bueno que estes
solo” le decía Fernanda a Rodo que no lloraba pero si estaba eléctrico. “Si si,
ahora nos vamos y me haces compañia en mi cama, no quiero dormir solo esta
noche…Vente Ignacio, mira ¿ves quién está allá? ve a saludarlo”.
“Tiooo” Ignacio corría con emoción al ver a Federico y este
se le hizo un nudo en la garganta al verlo. Se abrazaron y Federico arrancó a
llorar. “¿Cómo te has portado Nacho? ¿estás comiendo bien?, ¡estás inmenso! ¿no
le estás dando guerra a tu papá, no? “Todo bien tío, mi papá me trata bien, me
lleva al centro comercial, a comprar juegos, al cine, me lleva al cole”. “Que
bueno mi amor, pronto nos vamos a ver, te lo prometo” le dió un beso en el
cachete y al levantarse le vino un dolor muy fuerte “Mejor nos vamos rey, ya
abusaste demasiado”.
Mientras se iban del cementerio Federico, Vicente, Fernanda
y Ricardo, una persona a lo lejos vestida completamente de negro, lentes
oscuros y con un bastón, los observaba: “Ya
van a saber de mí” dijo.
2:45pm
Llegaron al apartamento luego de almorzar en la calle.
“Ignacio ve a descansar a tu cuarto mientras hablo con tu tía”. “Esta casa no
era de Rebeca?” “Sí, la heredé, cuando murió…también…”y se metió más coca.
“Vamos al cuarto, que eso fue a lo que viniste, a que te cogiera”
“Dios que rica estas no joda! Con razón mi hermano se casó
contigo, mira esas tetas!” se las agarró y beso cada una con morbo
mordisqueando los pezones. “Si, pero me salió marico el muchacho” “Y yo también
y te voy a coger”.
Estando ella de pie, él se agachó y empezó a lamer su vagina
hasta que ella soltó un fuerte gemido, tuvo una contracción, que derivó en un
orgasmo que la tumbó a la cama. “No te me desmayes que esto apenas empieza”
ella lo volteó e hizo lo propio con su pene.
No hubo lugar en esa habitación que no lo hicieran, hasta
encima de la poceta y terminaron en la ducha, aprovecharon para bañarse y se
tumbaron desnudos en la cama.
“Fernanda…¿quieres que lo que acabamos de hacer no sea solo
hoy, sino para siempre?” “¿Ah?” se quedó
en shock Fernanda.
Y yo también quede en Shock :O, la historia avanza ufff...las cosas se complican más... no se que pasara... ¿Quedara acaso algún sobreviviente? Saludos a Daniel...
ResponderEliminar