Diego dejaba a Edgar donde le había dicho.
-Quiero volverte a ver.
-Ya sabes las tarifas y dónde me ubico.
-Quiero sacarte de la calle y ayudarte.
-Tas loco viejito, yo no sé hacer otra cosa.
-¿Estudiaste?
-Bachillerato nada más.
-Te puedo meter en una universidad y estudias algo, yo te pago tus gastos, vives conmigo.
-¿Y te tengo que coger?
-Claro.
Edgar se bajó del carro y se asomó por la ventana del copiloto.
-Viejito tengo cinco años viviendo en la calle, burda de independiente y no quiero que me encierren.
-Tranquilo, tú decides que hacer, si quieres ir a la universidad o seguir cobrando por sexo, pero vas a tener techo y comida en mi casa. Piénsalo y me llamas, Anota mi número.
-Fino, yo te aviso qué tal.
Diego se alejó con una sonrisa en su rostro pero pensando en Arévalo.
Pedro salía de su última clase en la Universidad, lo que le quedaba era presentar la tesis.
Nelson lo buscó en su carro.
-Vamos a celebrar que terminaste la universidad y en la noche tiramos
-Bueno vamos a comer juntos pero luego tengo que ver a mi papá en el hotel donde se está quedando.
-¿Y qué pasó con Silvia?
-Mi papá le dió un patada, la botó de su oficina.
-Está tipa de verdad que no la reconozco, ella era tan conservadora, casi que monja y de repente es una perra enloquecida.
-Ella siempre fue así, lo que pasa es que contigo se hacía la mosquita muerta. ¿No viste que aceptó el trío? Le gusta la vaina.
-¿Tú quieres hacer un trío?
-¿Yo? Si... bueno, no sé...es raro, pero me gustaría con Arévalo.
-Marico pero a ti te volvió loco ese bicho. Te metió ese bate y enloquecíste.
-Igual que tú pendejo, te cogió y querías más.
-Si hacemos un trío no será con él, porque salgo perdiendo.
-Que gafo.
-Es verdad como compito con 23 centímetros, yo tengo la mitad, a lo mejor un poco más.
-Nosotros buscamos a uno como tú, micropene jajaja
-Guevón bastante que chillas cuando te cojo.
-Es verdad.
Ambos se rieron y luego pidieron el menú para comer.
-Por favor trae dos cervezas de momento.
-Queria comentarte algo, sabes que Orlando heredó un apartamento de Vicente, entonces quería proponerle que nos lo alquilara a un precio razonable y viviéramos juntos tú y yo ahí.
Pedro se le enrojeció el rostro mientras abría los ojos sin poder creer lo que escuchaba.
-¿Me estás proponiendo que vivamos juntos? ¿Tú? Me tienes sorprendido, pero fino, me gusta eso.
-Pero no te pongas Susanita, casita, el perro y los canarios, deja la mariquera, quiero vivir contigo por un tema de salir de mi casa y hacer lo que quiera, en este caso lo que queramos, hacer tríos, orgias., Estar desnudos todo el día.
-Me gusta eso, pero ¿Somos novios, no?.
-Jajaja si, digamos que tenemos una relación abierta, eso sí, no podemos tirar en el apartamento con otra persona a menos que esté el otro presente.
-Tú ya estás poniendo las reglas y ni siquiera sabemos si Orlando va a aceptar.
-Aceptará.
-Bueno llévame al hotel.
-Vamos a ese hotel, te cojo y luego vas a la habitación de tu papá.
-Me gusta la idea.
-Mientras vamos al hotel me lo vas mamando.
Bueno, y que se trae Diego??
ResponderEliminar