VENGANZA INFINITA. Capítulo 46

SINCERIDAD.

-¿A qué te refieres?

-Bernardo y Randy, tú sabes...son, tienen poderes ambos.

-Eso ya lo sabemos Kimberly. ¿Viniste hasta mi oficina a exponerme a decirme eso?

-¿Exponerte?

-Si, aquí no saben mi vaina y...vienes tú...

-¿Tu vaina? ¿Qué es tu vaina? ¿Que eres gay, esa es tu vaina? Mmmm vaya. Es decir yo te pongo en evidencia porque soy un "tranfor" que eso es lo que dirán, un marico vestido de mujer.

-Bueno entendiste.

Kimberly resopló y cerró los ojos. Le habló de los celos de Bernardo prque salía con Randy, que le volvió a ofrecer trabajo.

-¿Aceptaste?

-Bueno sí, pero no sé si hice mal. Que lo tome como que voy a volver con él, bueno volver, nunca hemos tenido nada, él es tu novio.

-Que buenó que lo tienes claro, yo soy el novio de Bernardo, tú la puta connla que acostó una vez y se enganchó.

Kimberly le dio una fuerte cachetada. Oliver se puso la mano en la mejilla viendo a Kimberly.

-Pensaba que decirte puta no te ofendía.

-No te me pongas estúpido e irónico Oliver, me quieres ofender y sabes que no te va a servir de nada.

Quieres mi opinión. Acepta el trabajo, si de verdad quieres salir de la calle acéptalo, es el primer paso. Cuando concretes aclárale el punto, que tomas el trabajo sin ningún compromiso de vivir con nosotros como un trio de amantes.

-¿Tú aceptarías el trio si yo fuera hombre como tú?

-Es que eres un hombre, tienes un guevote entre las piernas que lo confirma.

-Que básico eres Oliver, de verdad, tú tan inteligente, con un excelente trabajo donde ejerces tu profesión y hablando así.

-No quiero compratir a mi novio con un transgénero. Punto.

-Yo la verdad que los trios solo me gustan para el sexo no para una relación de pareja.

-Entonces estamos claros. Te alejas de nosotros y nos dejas en paz.

-Tranquilo.

Kimberly caminó hacia la puerta pero Oliver la detuvo poniéndole la mano en el pecho.

-El hecho de que te vayas de nuestras vidas no quiere decir que no pueda mamarte el guevo.

-Ya sabemos quien es la puta aquí.

Kimberly se subió el vestido enrrollándolo.

Oliver se agachó bajándole la ropa interior, era tipo faja que le ocultaba el pene.

El enorme pene se le presentó frente a su cara. El glande apenas se asomaba por el prepucio. Lubricaba.

Oliver echó para atrás la piel y acercó su lengua al glande limpiando el líquido transparente que salía.

Con su otra mano se sacaba su pene entre el pantalón para masturbarse

Kimberly lo tomaba de la cabeza para que se tragara todo su pene que ya estaba totalmente erecto.

Oliver la veía a los ojos.

-Bernardo estuviera aquí estaría excitadísimo viéndote como me lo mamas.

Oliver comenzó a moverse con ánimo mientras movía su lengua. Kimberly excitada le apretaba la cabeza contra su pelvis.

-Ya voy a acabar.

-Ya va, ya va, acabemos juntos. -Le dijo Oliver que comenzó a mover su mano más rápido para venirse.

Kimberly cerró la boca apretando los dientes mientras sentía como su semen salía de su pene y llenaba la boca del chico que tambien se corría pero en la alfombra.

-Wao...que rico coño. - Se puso de pie y sonó el pomo, intentaban entrar y tocaron la puerta. Oliver restregó con su zapato el semen ennla alfombra para desaparecerlo. Abrió la puerta.

-Oliver, ¿Qué haces aquí y encerrado?

-Jefe, estaba reunido con ella, algo personal.

El jefe vio a Oliver a los ojos, le vio la entrepierna abultada y la alfombra pisada y manchada. Vio a Kimberly.

-Hay otros lugares donde resolver estos asuntos personales Oliver, no aquí en el trabajo. Te espero en mi oficina.

El hombre se fue.

-Mierda, nos pilló.

-Eso te pasa por puta Oliver.

-Es tu culpa, no tenías que venir para acá.

-Te gusta mi pene mi amor, me tienes arrechera pero no puedes evitar estar conmigo y no pedirme que te de guevo. -Le decía Kimberly muy cerca de su boca.

-Ya vete. Y te voy a pedir que en lo posible evitemos contacto alguno contigo.

-Hasta que te den ganas de mi verga.

-Nunca vas a ser una verdadera mujer hablando como macho quesúo.

En la tarde, mientras Kimberly acomodaba algunas cosas en su casa, había conseguido velas y una linterna, dejó la comida lista y recogió agua para que sus hermanos hicieran el resto mientras ella salía a trabajar.

-¿Y hasta cuándo vas a seguir haciendo...eso que haces? Mamá va a morir y...

-Estoy en eso, estoy consiguiendo un trabajo "normal" -Le dijo a uno de sus hermanos. Sonó su celular.

<Randy>

-¿Un cliente?

-Un amigo mi amor, déjame sola.

--Hola cariño, voy saliendo a trabajar--

--Te busco y te llevo, voy en moto, quiero hablar contigo.--

--Ok, te espero, beso--

-¿Es tu novio? Sabe de tu trabajo.

-Si sabe.

-¿No es tu novio?

-Somos amigos, estamos saliendo.

-Ahora que estás saliendo con alguien deja ese mundo horrible de la calle, mira lo que te pasó hace meses y bueno casi todas las noches le pasa algo a alguna de ustedes. Deja eso, hazlo por nosotros.

Kimberly se le llenaronnlos ojos de lágrimas. -Justo hago esto por ustedes para que no les falte nada, es la unica manera de tener dinero rápido y mucho. Me voy, cuídense.

Randy ya la esperaba afuera. Se montó en la moto y tomó la avenida Boyacá hasta el mirador, ya oscurecía.

-¿De qué quieres hablar? Me tienes nerviosa.

-Quiero hacer el amor contigo aqui y ahora, necesito que me penetres.

-Randy ¿Tas loco?  ¿Aquí?

-No hay nadie todavía, anda, quiero.

-Me tienes seca, no, aqui no.

Randy bajó la mirada. -En realidad vine para acá por otra cosa aunque no descarto lo primero.

-Discutí con Bernardo por ti y casi vamos presos.

-¿Qué? Pero definitivamente estan locos, esos malditos poderes van a acabar con ustedes.

-Hay otra cosa que quería decirte, es más complicado e íntimo.

-¿Una fantasía que quieres cumplir?

Randy levantó la mirada y la vio a los ojos.

-Bueno, podría decirse que si.

-A ver, a lo mejor te complazco, he hecho de todo, dime.

-Quiero que te quites...las tetas.

-¿QUÉÉÉ?