VENGANZA INFINITA. Capítulo 55

Morbo a mil.

De pie con la espalda agachada recibía las embestidas de su novia.

-Sigue, sigue, dale aaaau, aaau. -Ewtaba oscuro, a lo lejos los carros pasaban a gran velocidad por la autopista, en el parque se escuchaban, al igual que a Randy los gemidos de otras parejas que estaban en lo mismo que ellos, Kimberly y Randy.

Con los pantalones en los tobillos, Kimberly sostenía a Randy por las caderas mientras lo penetraba como le gustaba; con fuerza. Le apretaba las nalgas, poco podía ver como su pene entraba en Randy pero dos hombres que estaban observando encendieron las linternas de sus celulares y alumbraron el culo del escolta, la otra linterna iluminó el rostro de Kimberly.

-Marico es un tipo, un trans, rolo e guevo que tiene.

-Coño mira como se lo mete, tiene ese culo abierto.

Kimberly retiraba el pene y los tipos iluminaban el culo dilatado. Uno de ellos no aguantó y sacó su pene entre el pantalón, se acercó a la cara de Randy pero este no quiso.

-No, no, salte yo no mamo...guevo aaaau, aaaau, au.

-Anda, mámalo un poco.

-No...vete.

-¡Que te vayas te dijo! -Le gritó Kimberly mientras sus gritos se mezclaban con los gemidos de las otras personas cercanas. El hombre apagó la linterna y le dijo a su amigo que le hiciera sexo oral.

-Coño mámalo tú ando quesúo. Después te cojo.

Kimberly retiró el pene y Randy se volteó para mamarlo, se lo tragaba todo, acariciaba los testículos, dejaba que el pene bajara por su garganta. Se levanta y detrás de él un hombre, el mismo que hace unos instantes lo iluminaba. Lo penetró.

Kimberly lo vió en la penumbra pero no dijo nada.

-Menos mal que no te gusta mamar güevo.

Randy se concentró y con su culo apretó con fuerza el pene del hombre que gritaba del dolor. Soltó y el hombre retiró su pene.

-Coño de la madre, ¿Qué carajo tienes ahí?

Randy seguía mamando el enorme pene de su novia. El hombre se acercó a Kimberly, se colocó al lado y comenzó a besarla. Randy se introducía ambos penes en la boca, las dimensiones eran evidentemente distintas pero eso no frenó a Randy para disfrutar los dos penes. 

-¿Quieres que te coja?

-Con ese vergón ni de vaina, yo paso.

-¿Y tu amigo?

-No sé pero creo que se lo estan cogiendo por otro lado.

-¿Por qué no te agachas y me lo mamas junto a mi novio y me sacan la leche.

-Eres un bicho ¿O bicha?

-Soy lo que me da la gana ser, ponte a mamar.

Se agachó y junto a Randy lamían, chupaban y se metían a la boca el grueso miembro de Kimberly mientras se besaban.

Randy lo tenía en su boca mientras el hombre se colocó debajó para lamer e introducirse los testículos en la boca.

Kimberly estaba tensa, a punto de venirse de repente hubo un silencio pero la chica estaba concentrada esperando descargarse en el rostro de su novio y el invitado.

Y así ocurrió. Ambos juntaron sus rostros y recibieron el semen en sus caras para luego besarse mientras saboreaban el líquido.

Un par de linternas iluminaron sus rostros húmedos.

-Miren a este par de maricos, bueno a tres. Hoy coronamos, nos vamos a llevar a la jaula a tres locas que van a pasar la noche con otros amiguitos. De pie los dos.

Kimberly se tapó y le iluminaron el rostro. -Mira esto hector, un tranfor, mujer con verga. Eso les va a gustar en la cárcel. ¡MUÉVANSE!

Randy y el hombre se levantaron, Kimberly se acomodó el pantalón. -¿Qué nos van a hacer?

-¿Nosotros? Nada, en la comisaría es la fiesta. ¡Muevan ese culo y se montan en la patrulla!

El otro policía sacó el arma y los apuntó.

-Tranquila, yo me encargo de estos güevones. -Le susurró Randy a Kimberly.

-Muévete pues ¿O quieres que te monte a patadas a la patrulla?

Randy vio al policía mientras el arma se desarmaba cayendo al piso, al igual que la del compañero cuando intentó desenfundarla.

Los elevó en el aire unos tres metros mientras dejaba sin batería a la patrulla.

-Mierda...¿Qué coño es esto?

Randy hizo que se desmayara el hombre que estuvo con ellos.

-Vámonos, no tenemos mucho tiempo.

Corrieron hacia la moto y se montaron. Rodaron unos cuantos metros hasta llegar al complejo cultural cercano al parque.

-¡Qué susto! Por un momento me imaginé en la jefatura violada por quién sabe cuántos malandros asquerosos.

-¿No te acuerdas con quién estás? Yo sabía que eso podía pasar.

-Me dio mucho morbo cogerte en ese parque y en esa oscuridad sabiendo que había más gente por ahí.

-A mi me das morbo tú mi amor, cada vez que me coges me excitas más. Cuando lleguemos a casa repetimos.

Se volvieron a montar en la moto y se fueron a cenar a una arepera.

Randy pidió un hervido, Kimberly una cachapa.

-Ya no te ves con Bernardo ¿verdad?

-Ya te dije que no Randy, de hecho no estoy trabajando con él aunque me insiste que vaya. Y quiere acostarse conmigo.

-Solo acepto que te acuestes con él si te paga en verdes, se baja con una buena tajada.

-¿Ahora qué, eres mi proxeneta?

-Tu lo que eres es mi dueña, tu ordenas, solo te digo que le saques provecho a eso. Tenlo contento, Bernardo es peligroso, mira lo que hizo con el tipo más poderoso del país. Lo mató a través de la esposa.

-Yo no puedo creer eso, o sea,me parece increíble lo que pasó en televisión, pero me cuesta creer aún más que haya sido Bernardo.

-Mi amor, mató a una decena de ministros y diputados. ¿Todavía dudas de que es un asesino?

-Al principio me parecía bien lo que hacía pero es que ahora mata por matar. Lo que pasó en su casa. Bueno tú estabas. También eres responsable...pero...

-Yo lamento lo qué pasó, no pensé que nuestra rabia en el momento de pelear activaría nuestros poderes hasta ese punto.

-Bernardo está contaminado de odio y venganza y creo que va para peor.

-Por eso tienes que estar de buenas con él, que crea que si quieres estar con él pero le das largas, si te pide sexo se lo das, pero que te coja, no quiero que le metas el güevo a otro hombre que no sea yo.

-Dijiste que yo soy tu dueña. ¿En qié quedamos?

-Si...si...coño pero...es que ese güevo es mio no joda y solo pensar que te vas a coger a ese tipo...no.

-Tranquilo...seré pasiva con él, no te angusties pero deja esos celos y esa ansiedad. Tu pasaste de cogerte a hombres pa matar las ganas porque lo tuyo son las mujeres a que ahora solo quieres que te coja yo y no quieres saber de mujeres, cucas ni cogerte a un macho.

-¿Y no te gusta eso?

-Hoy te dejaste coger por un desconocido.

-Fue el calor del momento.

-En el calor del momento puede que me coja a Bernardo.

Randy dio un golpe en la mesa y se paró.

-Túúúú...no vas... -Se detuvo y se fue al baño.

Kimberly pagó la cuenta y se fue al baño. Randy orinaba, Kimberly se puso al lado de él a hacer lo mismo.

-¿Yo no voy a qué? -Le dijo Kimberly mientras se acercaba y le daba un beso en la boca.

Randy temblaba, su piel se erizó. -No me hagas esto Kim, no te lo cojas, no, por favor.

-Quédate tranquilo, yo no sé si me voy a acostar con él, no te adelantes a cosas que no han sucedido. Vámonos.

Randy llegó a la casa de Kimberly, se quitó el casco y se lo quitó a ella.

-Este no es el momento ni el lugar para esto, pero te lo voy a decir. Me quiero casar contigo, no sé cómo, ni donde pero quiero hacerlo.

Kimberly se puso fría. -Ya va, ¿tengo que responder algo, ahora, ya?

-Entramos a tu casa me vuelves a coger y luego me respondes ¿Te parece?

-¡Estás loco!