A QUE NO TE ATREVES 8 Capítulo 9

Regalo de cumpleaños.

Era el cumpleaños de Eduardo y estaba pensando que regalarse, pero estaba sin empleo aunque tenía dinero ahorrado y asegurado 3 meses de alquiler. Aún era temprano y estaba tumbado en su cama, desnudo. Sonó su celular.

–<Buenos días mi amor, feliz cumpleaaañoooos>

–<Gracias nene, ¿cómo estás? ¿cómo sigues?

–<Ya mejor con buen ánimo ¿ y tú? Tienes que estar de buen ánimo hoy que es tu cumple.

–<La verdad es que no quiero hacer nada en mi cumple, estaba pensando salir para comprrame mi regalo, ya veré que hago>.

–<Mmmm bueno, mientras ven a abrirme que estoy aquí afuera de tu apartamento>

Eduardo estaba tocándose el pene mientras hablaba con Victor y ya lo tenía erecto, se levantó y se puso el interior, que a duras penas ocultaba la erección. Fue a abrir la puerta.

Victor estaba con un ramo de rosas rojas en una mano y en la otra una pequeña caja.

–¡Feliz cumpleaños! –Le entregó el ramo y la caja, Eduardo se asomó a ver si no había nadie.

–Pasa, pasa.

–¡Ay chico deja los nervios!

Puso el ramo en un jarrón. –¡Gracias!

–Pero abre el regalo. –Le dijo Victor sonrriendo.

Abrió la caja, al sacar la tapa desprendía un fuerte pero agradable olor a cuero. Una billetera marrón de una marca reconocida.

–¡Pero esto te debe haber costado un dineral! Está arrechísima.

–Tú lo vales así que no me importa, me quedé limpio pero al ver tu cara ha valido la pena.

Lo abrazó y luego le dio un beso.

–Yo no vine solo a traerte este regalo, vine para darte otro.

–¿Otro?

Se quitó la ropa, no traía interior. –Vine a que me cogieras.

Eduardo no tuvo que espera mucho para volver a tener otra erección así que agarró a Victor y lo volteó pegándolo contra la pared, se escupió la mano varias veces y se la pasó entre las nalgas. Humedeció su pene y fue directo a penetrarlo.

Cuando lo introdujo completo se corrió de una vez. Empujó con fuerza a Victor contra la pared y soltó.

–¿Ya?

–Sí… disculpa, estaba muy excitado.

–Coño, pero no duraste ni 30 segundos.

Eduardo se puso rojo y dio un golpe en la pared.

–Estás perdiendo facultades.

–¡Bueno YA victor, me vine antes, tampoco es para que me lo estés diciendo  a cada rato, solo me ha pasado hoy!

–Ok, ok, yo solo digo es queeeee…como no te había pasado. Bueno, esta noche te espero en el restaurante Valle, a las 8, seguiremos la celebración ahí

–Estás gastando mucho dinero nené, no me gusta eso.

–Tranquilo que eso ya está resuelto.

Victor se tomó un café con Eduardo para luego irse.

–Discúlpame el reclamo de antes, se que esas cosas pasan, has estado estresado.

–Discúlpame tú a mi…no estoy en mi mejor momento.

Se volvieron a besar, que duró unos minutos. Luego Victor se fue.

–Ya sé lo que me voy a regalar este cumpleaños. -Se fue a duchar y se vistió.

Cogió las llaves de la casa y del carro.

Llegó donde un cerrajero para hacer una copia de sus llaves y de ahí a hacer varias diligencias.

En la tarde regresó a su casa, volvió a ducharse para verstirse para la noche, envolvió el regalo, una pequeña caja. La vio y la apretó sonrriendo y guardándola en el bolsillo interno de su chaqueta.

Al llegar al restaurante, deja el auto en el Valet Parking y entra.

–Buenas noches, bienvenido. ¿Viene solo o acompañado, tiene reservación?

–Estoy buscando a alguien pero no se si llegó, él reservó.

–¿El nombre de la persona?

–Victor.

–Al fondo está la mesa, bienvenido cumpleañero, tome. -Le entregó una pequeña botella helada de Champaña y 2 copas.

Vio a Victor y este se levantó de la mesa para abrazarlo.

–Nunca había venido a este restaurante, debe ser caro.

–Ya te dije que tú lo vales. Hoy vinimos a disfrutar.

–¿Pero si vamos a estar nosostros 2 para que pediste esta mesa tan grande?

Victor envió un par mensaje.

A los segundos llegaban de otras mesas los amigos de Victor, 4, los 2 transexuales y un par de amigos. Eduardo al verlos se puso pálido y luego su rostro se enrrojeció de la vergüenza pero al ver que del otro lado llegaba 4 personas más se tranquilizó. Eran 4 amigos de él, entre ellos Diego y Calixto.

–¡Mi amoooooor Feliz cumpleaaañoooos! Una de las muchachas trans lo abrazó efusivamente, a pesar de que la mesa estaba apartada del resto, algunas mesas voltearon al ver los saludos de los amigos de Victor.

–Por favor no griten tanto, nos están viendo.

–Ay chico relájate, mira que luego te doy tu regalito aunque se moleste tu noviecito.

Eduardo saludó a Diego.

–Chamo si no es así no te veo.

–Feliz cumpleaños cabezón, ya no vivo aquí, ahora vivo en la ciudad de mi novio.

-Calixto lo vio a la cara.

–No creo que sea el momento de aclarar nuestra situación. -le susurró a Diego.

–Te presento a Calixto.

–Gracias por venir.

–Me invitó tu novio, se salió con la suya el chamito. Y si trajo a unos amigos bastante escándalosos. Medio fuertes.

–Diego son transexuales, no te pongas homofóbico.

–No me dejen solo ustedes 4 por favor, los amigos de Victor son peligrosos.