A QUE NO TE ATREVES Penúltima temporada. Capítulo 3

Circulo vicioso.

3 días después Diego tomó una decisión. Regresar a la capital a buscar trabajo y estudiar allá. Se quedaría a vivir en casa de un amigo mientras conseguía empleo para pagar una habitación.

–Aprovecho que es el cumpleaños de mi amigo, vamos a su reunión y ya me quedo.

–Es tu decisión Diego pero, ¿qué va a pasar con nuestra relación? ¿a distancia?

–No, bueno, de momento, yo vendría los fines de semana y tú vas para allá cuando puedas, ahí vamos viendo.

–Bueno…si tú lo dices…a mi no me parece, pero si estás decidido a irte pues vete.

–Pero no te pongas así, ¿qué voy a hacer aquí si el viejo este me tiene bloqueado?

–El viejo ese es tu papá Diego, no hables así.

–Definitivamente sigues enamorado de él. Yo me voy y nos veremos cuando me organice por allá.

Calixto sin darle mucha importancia lo abrazó y le deseó suerte.

–Parece que estás terminando conmigo. -Le dijo Diego.

–Es que estoy terminando contigo, yo no voy a tener una relación a distancia, ya tuve una clandestina, suficiente, quiero una relación normal.

–Pero yo quiero verte vale, estar contigo, dormir contigo.

–Podemos hacer eso, en plan de amigos con derecho.

Diego lo vio a los ojos. –¿Me estás jodiendo verdad? No me digas que eso es lo que quieres.

–No es lo que quiero, es lo que hay, lo que te puedo ofrecer.

–Bien, de pinga, gracias, ya veo que el que se enamoró en esta relación fui yo…chao.

–Diego, Diego, ¡Diego coño! -Salió del apartamento pero Diego no se devolvió y bajó por las escaleras llevando su maleta.

–<Acepto>

–<¿Perdón?> –Decía por el celular Nestor al escuchar a Camilo.

–<Que acepto irme contigo a la capital, acepto todo>

­–<Que bien, bueno prepara tus cosas que mañana nos vamos>

–<Ya tengo todo listo, ya renuncié al hotel, en un mes busco mi liquidación>

–<Caramba pero me salió acelerado el muchacho>

–<Tu dijiste que no había que perder tiempo, ya hablé con mi familia y todo perfecto>

Al dia siguiente Nestor buscó a Camilo para ir al terminal, compraron los pasajes y esperaron que llegara el autobús.

Montaron las maletas y se subieron a la unidad.

–¿Estás seguro que quieres venir conmigo? ¿tener una relación con este viejo?

–Tú no estás viejo, estás chévere. ¿Te parece que tengo dudas cuando renuncié a mi trabajo, hablé con mi familia y estoy aquí sentado?

–Esta bien. –Se sonrió y le tocó la barbilla.

–Voy a mear antes de que esto arranque.

–Apúrate que esto ya está lleno.

–Voy chola.

Bajó del autobús y Nestor apoyó la cabeza del respaldar y se quedó dormido. Pasaron escasos 2 minutos y el autobús arrancó.

Camilo salía del baño para montarse nuevamente pero al salir se dio cuenta que el autobús se había ido.

–MIERDA SE FUE. Señor, señor, ¿el autobús que salía a la capital ya se fue?

–Se acaaaaaba de ir pero ya no lo alcanzas, apenas sale de aquí agarra autopista.

–Verga y mi celular está ahí, ¿cómo hago, cómo hago? Necesito un teléfono. –Se llevó las manos a la cabeza mientras giraba buscando alguien que alquilara celulares, estaba nervioso.

–Chamo, ¿te pasa algo?

–Necesito llamar a alguien, se fue mi autobus con la persona que yo viajaba.

–Te presto mi celular.

–Ay gracias, marcame este número.

=0422 2662033= <<Llamando a Papá>>

A Diego se le tensó el cuerpo y colgó la llamada. –Ya va que se cayó la llamada. –Puso el celular privado y volvió a llamar.

–Toma, está repicando.

–<<Hola…si si ya vi, estoy aquí varado…nada me voy en el próximo, te aviso al llegar.>> –Listo, gracias  papá, te debo una.

–Si quieres nos vamos juntos en el próximo autobús, vamos a comprar los pasajes.

Ya montados en el autobus, comenzaron a charlar.

–¿Y ese tipo es tu amigo?

–En realidad es mi novio, es mayor que yo, pero está buenísimo. Tiramos una vez y wao fue lo máximo, creo que me enamoré y encima me propuso irme con él y me paga el alquiler de un apartamento o habitación, él lo va a buscar.

–Ah chico pero te sacaste la lotería. Te van a resolver la vida y un viejo con plata.

–Bueno sí, pero me gusta el tipo, no lo hago por interés.

–No, no, se nota. -Diego se tocaba encima del bluyín.

–¿Y que rol eres tú?

–Pasivo

–Versatil. Mira pero tu novio no se tiene que enterar de lo que hagas aquí. –Le mostró la entrepierna y se sacó el pene.

–Mámalo. –Le dijo en voz baja, estando atrás sin nadie alrededor era perfecto para una felación sin interrupciones.

Camilo sin poner mucha resistencia se agacha y comienza a mamarlo, mientras Diego le mete la mano por el pantalón para tocar su culo.

 

La cabeza de Camilo subía y bajaba con rapidez mientras Diego echaba la suya hacia atrás disfrutando de la felación.

–Voy a acabar.

Camilo se detuvo y comenzó a masturbarlo, Diego abrió las piernas y se corrío en el piso.

–Lo mamas divino coño, ese novio tuyo debe gozar.

–Jajaja, ¿sabes dónde queda esta dirección?

–Si, está lejos del terminal, si quieres nos quedamos en un hotel, ya es un poco tarde y mañana te llevo.

–Mmmmm no se, me da paja con este tipo.

–Llámalo y le dices que aún no sales del terminal, hay pocas unidades.

Camilo le inventó un cuento a Nestor que sorpresivamente le creyó. Llegaron al hotel y esta vez tuvieron sexo.

Diego lo penetró y comenzó a disfrutar del sexo mientras grababa la penetración, ya lo había grabado mientras volvía hacerle sexo oral. Dejó el celular a un lado y continuó penetrándolo. Camilo gemía.

–¿Así te coge el viejo ese?

–Ah, ah, ah no, sigue, dale.

–¿Te doy más duro? –comenzó a darle nalgadas.

–Si, dale, dale.

Le abrió las nalgas y siguió empujando más duro. Varios empujones más y se corrió.

Se tumbaron en la cama. Al rato cuando Camilo se durmió, Diego cogió su celular y, acercándose a los labios del muchacho lo besó y tomó la foto.

5 de la mañana. Diego despierta a Camilo para irse del hotel.

–Vamos a ducharnos para llevarte a la casa de tu novio.

–Me siento mal.

–¿Qué tienes? ¿Te duele algo?

–Lo que hicimos, estoy recién con este tipo y ya me acosté con otra persona.

–Tranquilo, eso se te quita con más sexo, vamos a la ducha a cogerte.