martes, 15 de marzo de 2022

Pasticho hormonal. Caítulo 32

 


Castro ya tenía una semana activo en la oficina de ingenieros. Hoy le tocaba estar en la nueva torre que están construyendo, apenas llegara él, Douglas se iba a la productora a grabar varios videos pornos.


Estaba sentado en el mesón de la cocina comiéndose un sandwich de queso, pavo, lechuga y tomate. Le daba unos enormes mordiscos mientras Agustín agachado, le mamaba el enorme pene. –Flaco, que rico lo mamas, me encantaría cogerte de nuevo pero ya voy tarde. -Le puso la mano en la cabeza para acariciarle el cabello mientras lo veía metérselo casi todo en la boca. Castro mordía el sandwich y bebía un poco de café mientras su novio mamaba el pene. Agustin levantaba la mirada para verlo a los ojos. El hombre masticaba el trozo de sandwich y se sonreia. Terminó de beber el café y eructó, le acarició la cabeza a Agustín y comenzó a pellizcarse con fuerza las tetillas para poder acabar. Lo hizo con fuerza, cerró los ojos y gruñía mientras eyaculaba dento de la boca de Agustín que iba tragando y gimiendo. Al rerminar, el chico se levanta y besa a Castro pasándole los restos de semen que aún estaban en su boca. 
–Que rico mi flaco. Vámonos. -Se vomvieron a besar.

Agustín llegó a las oficinas del supermercado y Castro a la nueva torre.
–Bueno, aquí está anotado los pendientes de algunos pisos. La lista de materiales que llegan hoy y hay que pasar por la alcaldía para renovar los permisos. Sabes que con esa gente siempre hay peos.
–Vete tranquilo a coger culos y cucas. Yo resuelvo.
–Jajaja pendejo. ¿Sabes que Raúl está a punto de irse a Alemania? Va a trabajar allá con una productora que tiene alianzas con la de aquí.
–Que bien vale. ¿Y tú, no vas a ir?.
–Es probable.
–Vete, sabes que yo me encargo de todo esto.
–Lo se...ah otra cosa Castro, el piso 32 sabes que hay unas fallas ahí, no son graves pero están trabajando, de eso se encargan mañana, igual sube y chequea. -Castro se quedó pensando.
–¿Fallas de que tipo? ¿Hay peligro? ¿Se puede subir?
–Si vale, nada estructural, si fuera eso se nos cae todo...pareces nuevo. Unas conexiones que no se hicieron. Acometidas, ductos. -Volvió a quedarse pensativo mientras veía a Douglas.
–¿Qué te pasa?
–No, nada...pensando tonterias.
Douglas se va abrazando a Castro. El hombre coge las carpetas, se pone el casco y comienza a revisar punto por punto junto al jefe de obras.
Una hora más tarde, entra a la oficina y llama a Agustín para decirle que vaya a la obra.
–Anda, vente y te hago un recorrido.
–Amor estoy trabajando.
–Escápate, aqui hay internet y wifi, puede trabajar desde aqui, te espero.
Luego de media hora el carro de Agustín entra a la obra y Castro le indica donde dejarlo. Le da un beso en la boca y le pone el casco en la cabeza.
–Eres un loco.
–Vente, vamos hasta el piso 32 para que veas la vista que tiene esta vaina.
Subieron por el ascensor y Agustín le contaba que hoy iba a lo del tatuador.
–Esta ves no te puedo acompañar mi flaco, estoy full aquí, pero ve tu. Si te lo vas a tirar, me lo dices, no tengo problema.
–¿Y si tu tiras aqui en la torre me lo vas a decir?
–Si, hoy voy a tirar en la torre. -Cuando Agustín iba a reaccionar, llegan al piso 32 y se abre la puerta. Salen y Castro voltea al chico para que vea la vista. Toda la montaña sin ningún estorbo.
–Wow...que impresionante, hermoso esto.
–La gente va a pagar lo que sea por tener esta vista. -Castro se desabrochó el pantalón y se lo quita junto a los zapatos. Se acerca a Agustín y lo abraza por detrás, comienza a desabrocharle la correa. 
–¿Qué haces?
–Desnudándote para cogerte en las alturas. -Agustín se voltea y ve a Castro sin pantalones ni zapatos y el enorme pene totalmente erecto. El chico se termina de quitar el pantalón, Castro busca en los bolsillos un sobre de lubricante y el popper. Le entrega el frasquito a Agustín mientras el se coloca el lubricante por todo su grueso miembro.
–¿Dónde me vas a coger? -Inhala el popper y Castro lo carga, lo voltea para que vea la montaña y lo pega contra una columna. –Mientras te cojo disfruta la vista y gózate mi verga dentro de ti. -Castro toma su pene, lo lleva al culo del chico y lo penetra sin mucha espera, provocando un fuerte grito. Vuelve a usar el popper.
Castro, con Agustín cargado, lo empujaba contra la columna mientras elnchico no paraba de gemir. –Abre los ojos y mira la.montaña.
–Me duele.
–Aguanta flaco, métete más popper. -Castro le daba con más fuerza, a Agustin se le cayó el frasco y Castro se separó de la columna y ahora con la fuerza de sus brazos movía al chico para que su pene entrara y saliera del culo.
Camina con el chico cargado casi al borde del piso.–Voltea. -Agustín mueve la cabeza y se asusta al ver el vacío.
–¿Qué haces?
–Voy a cogerte en el borde del edificio
–¡Estás loco!
–Acuéstate aquí. -Castro lo había bajado. –Frente a mi boca arriba y tu cabeza fiera del edificio.
–Amor... No
–Hazlo, flaco, hazlo. Estás conmigo, no te va a pasar nada que no quieras. -Barrió el piso para quitarle las piedras y el polvo. Agustín se acostó dejandonsu cabeza colgando hacia afuera y viendo al revés la montaña. Castro se arrodilló frente a Agustín, le levantó las piernas y las echó hacia el pecho del chico. Lo penetró de una vez y cogiéndolo de los hombros comenzo a empujar con fuerza, Agustín gritaba, su cabeza cada vez coñgaba más y le decía a Castro que se iba a caer, pero el hombre lo sujetaba con fuerza mientras arremetia con fuerza. Castro bajaba su cabez y le pedia al chico que levantara la suya para besarse. Agustin no paraba de gritar viendo como su cuerpo se salía del edificio.
Castro lo jaló sin dejar que la cabeza del chico entrara al piso. Sus movimientos fuertes seguían. Agustín comenzó a llorar pero pedía más, se aferraba a Castro mientras veía la montaña, estaba mareado pero a la vez tan excitado que cualquier otra cosa quedaba en segundo plano.
Luego de varios minutos en esa posición, Castro levanta a Agustín y lo pone frente a el de pie. Mirando a la montaña y él detrás. Lo vuelve a penetrar. Se mueven hacia una columna para que Agustin se aoye y Castro comiemza a penetrarlo violentamente. Lo abrazó con fuerza mientras se movía, Agustin  se sostenia de la columna. Luego de 10 minutos el chico se masturba y Castro al verlo comiemz a a moverse más rápido para acabar dentro de su chico.
–Avísame cuando estés a punto ¡Avísame!
–¡Voy, voy, voy! AAAAAAAAAH AAAAAH. -Los gritos de Agustín se intensificron, Castro se afrerró al chico y gritaba von fuerza mientras sentía cada chorro de semen salir de su pene e inundar el culo de su chico.

Castro retira el pene y con él sale un chorro de semen, Agustin se estremece sosteniéndose de la columna para no caerse. Castro lo ayuda. Busca toallitas húmedas para que smbos se limpien. Se besan. Agustín no puede caminar, está mareado.
Se visten y se montan en el ascensor. El chico se abraza a Castro.
–Amor, estuvo...maravilloso...me duele todo...no puedo...ni caminar. -Se besan
–Para que sepas quien es el macho que te da como es.
Llegan a planta baja y se despiden.
–No sé como voy a trabajar ahora, estoy que no puedo ni hablar. Y en la tarde con en tatuador...-Vuelven a besarse y se monta en su carro.
Agustin se va y Castro se queda viendo como el carro se aleja.

–Vamos a ver si te quedan ganas de tirar esta tarde mi flaco. Te dejé estropeado.

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