lunes, 29 de octubre de 2018

Y SI ME ENAMORO. Capítulo 86

-Te sientes macho cuando sacas tu arma.
Arévalo disparó hacia la ventana rompiendo el cristal, Diego se paralizó, tragó saliva y el policía se acercó a su hermano. -Así quiero que estés, asustado, uno, soy tu hermano y pronto lo vas a comprobar y dos, Orlando no se va a quedar contigo, de eso me voy a encargar yo.
Entraron a la oficina dos de seguridad y la secretaria, Arévalo se guardó el arma
-Te voy a denunciar y te voy a meter preso.
Arévalo se acercó a Diego de nuevo y lo agarró por el cuello ahorcándolo.
-Házlo y va a ser tu último día en este mundo mamaguevo. -Los guardias lo tomaron por el brazo pero el policía se soltó saliendo él solo de la oficina.

Diego marcó en su celular el número de su abogado. -Te tengo trabajo, ahora te explico por mensaje. -Colgó la llamada, cerró los ojos y se pasó la mano por arriba del labio secándose el sudor. Fue al baño a verse la nariz, al salir llamó a Orlando para verse en la tarde y hablar, lo pasaría buscando por la universidad pues estaría ahí todo el día.

---------
-¿Y a ti que te pasa? Tú entras, sales de la morgue cuando te da la gana, no das explicaciones. Tienes personal tu cargo, tienes todas las probabilidades de que te boten.
Arévalo estaba del peor humor posible, cerró los ojos y respiró.
-Mire jefe tengo un cogeculo en la cabeza, mi mamá se murió, me acabo de enterar quien es mi papá y resulta que era mi novio, o sea me cogí a mi papá. Y para terminar el carajito que me gusta está empatado con el carajo que peor me cae en la vida y es mi hermano.
Jesús se había quedado inmóvil y con los ojos abiertos al escuchar lo del padre de Arévalo. -¿Tú me estás jodiendo? Si para justificar tus ausencias del trabajo podías decirme otra mentira pero no te inventes historias de Delia Fiallo.
-Ah vaina jefe, es verdad coño. Lo que más me arrecha es no poder estar con Orlando, ese carajito me gusta, yo no lo quiero de novio pero coño...
-¿Orlando Vásquez el hijo de mi amigo Orlando?
-Si...
La cara de Jesús cambió, bajó la mirada.
-¿Qué pasó? Mira que no le he hecho nada al pana, no vaya con el chisme.
-No, no, no es eso...-unos segundos de silencio. -...ese chamito es...
Arévalo arrugó la frente -¿Le gusta Orlando?
Jesús miró a los ojos a Arévalo y sonrió, Arévalo lo miró fijamente, mientras ambos no perdían mirada, al policía le entró la ira y su cara comenzó a enrojecerse, cogió de la camisa a Jesús y lo empujó contra la pared.
-¿Tiraste con Orlando? -Empujó más fuerte -¿Te acostaste con Orlando?
Jesús entró en pánico -Arévalo me estás haciendo daño.
-Te acostaste con Orlando, todos se acuestan con Orlando y yo me quedo por fuera.
-¡Suéltame!
Arévalo lo soltó y le dió un golpe en la cara que hizo que sacudiera su mano por el dolor.
-¡TE VAS DE AQUI Y NO VUELVAS!

Arévalo se fue de la morgue llorando, pensando en lo que había hecho y que probablemente se quedaría sin empleo.

1 comentario: