lunes, 22 de mayo de 2017

DE REPENTE TU 5. Capítulo 7


Viaje con sorpresa.



Luego de pasar la tormenta que tenían sobre ellos, regresó la calma al mar y el cielo se despejó con un sol radiante.



Al rato, Fabián bajó al camarote y María Corina se había quedado dormida.

–Mi amor, ¿estás bien? Ya no llueve y el día está bien bonito.

–Ay amor, me quedé dormida. ¿qué ha pasado?

–Jajaja pero te quedaste profundamente dormida, hubo una tormenta, pero ya pasó, todo bien.

–Que bueno.

–Vamos a cubierta, ponte el traje de baño y mucho protector.



Fabián subió un momento para acomodar una cava con bebidas para tener mientras tomaban sol. El Capitán se acercó.

–¿Será que podemos pasar por Puerto Cabello para dejar una encomienda personal?

–Si claro, no hay problema.



Cuando ya estaban tumbados al sol, Fabián habla con María Corina.

–Luego de hacer el amor me dijiste que tenías un retraso, no te paré ni medio porque empezó lo de la tormenta. ¿Es cierto? ¿desde cuando tienes el retraso?

–Hace más de una semana, soy un reloj con la regla, por eso me preocupé.

–Yo no estoy preocupado, estoy feliz si de verdad estás embarazada.

A María Corina le dio pena verlo tan contento y mantener la mentira.

–Bueno, en realidad, luego que usted subió me bajó, así que, falsa alarma.

–Cónchale vale ¿y entonces? ¿será que seguimos intentando?.

Fabián se le montó encima.

–¿Qué hace, qué hace? Aquí no, nos van a ver.

–Tranquila, desde donde están no nos ven y si nos ven pues que importa. -Le dio un beso en la boca y le quitó la parte de arriba del traje de baño. Comenzó a chuparle los pezones mientras metía su mano en la parte de abajo del traje de baño. María Corina hacía lo mismo pero en el bermuda de él hasta que se lo quitó.

–Te quiero coger aquí.

–Hágalo.

Le quitó la parte de abajo y tomando su pene lo ubicó frente a la vagina y comenzó a penetrarla.

–Esta vez vas a quedar embarazada.

La penetró por completo mientras seguía tocando sus pechos y besándola. Ella levantó las piernas y él se puso sobre ella para seguir moviéndose. Unos minutos más y Fabián se corrió dentro de ella que lanzó un fuerte gemido.

Se tumbó hacia un lado.

–Wao, que rico es hacerlo el aire libre, segunda vez que lo hacemos.

–Qué vergüenza con el capitán y el ayudante, seguro nos vieron.

–Tranquila, ellos son unas tumbas.

Se vistieron y abrieron un par de cervezas.



–¿Y este yate de quien es?

–De uno de mis tíos, el hermano mayor de mi papá.

–¿Por qué no vive con él y sus primos?

–Prefiero independizarme, no me gusta vivir con ellos, mi tío es demasado estricto, déspota y machista. No me la llevo mal con él, de hecho es con el que mejor me la llevo pero no, su caracter es terrible.

–¿Gana dinero con las empresas, usted vive de eso, cierto?

–Sí, manejo las acciones de mis padres y mensualmente recibo un pago. Cuando cumpla 25 años seré el responsable de esas acciones y pasaré a estar en la Junta Directiva, de momento me administran el dinero.

–Ok. ¿Mucho dinero, supongo?

–Bastante amor, más de lo que imaginas, no sabes cómo es eso. A veces no me da chance de gastarlo, a lo mejor te suena pedante, pero es así. Lo que hago es donarlo a hospitales y fundaciones. Yo no soy de gastar dinero a lo loco.

–Me parece bien. Disculpe Fabián si le incomodan mis preguntas, no quiero que piense que soy una interesada.

–¡No vale, no tengo motivos para pensar eso, además, ahora tengo una excusa para invertir el dinero y que mejor que contigo.



Mientras tomaban la tercera cerveza y comían algunas cosas para picar, escucharon un helicóptero acercarse. Con el ruido del aparato no ecucharon que también se acercaban por mar dos lanchas con cinco personas cada una. Eran policías.

–<<TODOS CON LAS MANOS EN ALTO>> Se escuchaba desde el helicóptero a través de un megáfono.



Las lanchas se acercaron hasta el yate y antes de abordar, uno de los oficiales habló con Fabián que también se había acercado hacia la lanch.

–¿Qué ocurre oficial?

–Tenemos una orden para revisar la embarcación. Tenemos información que transporta droga.

–¿Droga? ¿droga, debe haber un error oficial, estamos mi novia y yo, el Capitán y un ayudante.

–¿Podemos abordar y chequear?

–Si, si claro, no hay problema revise todo lo que quiera y los que quieran subir. –Fabián tomó la orden de allanamiento para leerla. Con ellos venía un Fiscal del Ministerio Público.



Los policías comenzaron a revisar el yate por todos lados. El helicóptero ya se había ido.

Los policías revisaban con unos perros los camarotes, ambos estaban nerviosos, ladrando y salivando. Al entrar al camarote pequeño consiguieron una parte del piso falso, golpearon y sonaba hueco, levantaron. Era una compuerta camuflada.

–AQUI HAY ALGO, LOS PERROS SE ACTIVARON.



Se escuchó un disparo. Cuatro policías subieron directo a la cabina del timón. El Capitán se disparó en la sien. El ayudante estaba al lado del cuerpo.



–Quedan todos detenidos.

–Oficial debe haber un error, este yate es de mi tío, debe tener una explicación. Él se llama Ernesto Silva

–¿Error? Allá abajo hay por lo menos 500 kilos de droga. Esta embarcación está a nombre de Juan Carlos Rangel, lo dice la orden que le entregué, ¿no la leyó?

–Si, si, bueno…



–Ay Fabián ¿y ahora? ¿qué va a pasar con nosotros?

–Tranquila yo voy a llamar a mi abogado.

–Pero es un problema de drogas, es tráfico de drogas, es mucha.

–Tranquila no hables ni digas nada, nos vamos con ellos, recoge tus cosas.

–Tengo miedo.

–Yo también mi amor, pero estás conmigo.

–Quedan detenidos bajo averiguación y el yate queda confiscado para experticia. venga para acá. TRAIGAN AL JOVEN Y ESPÓSENLO.



Se montaron en la lancha rumbo al puerto de La Guaira.

No hay comentarios:

Publicar un comentario