Huevos revueltos 278

 

Guillermo se quejaba del dolor mientras Antonio introducía por completo su enorme pene. Reddy le acercó el frasconde poper a Guillermo. –Ahora si, reviéntale ese culo que este aguanta.

Antonio le cogio connfuerza de las caderas mientras otro hombre que pasó le metió el pene en la boca a Guillermo. Aitor veia la escena, con la mirada perdida.

–Esto no es nada con lo que vas a disfrutar tú ahora, ven.

–¿Adonde me llevas?

–Al Paraíso.

Saúl estaba recibiendo las embestidas de un hombre negro mientras se lo mamaba a otro tipo. –Papito, métete esto para que aguantes lo que viene.

Detrás del hombre negro habían ocho personas masturbándose esperando su turno, del lado de la cara del chico había otra cola para que se los mamaran. El negro le abría las nalgas al chico y empujaba metiendo todo su pene, lo retiró, le dio una nalgada y ahora venía el siguiente. Un hombre blanco, comenzó a introducirlo en un culo ya dilatado, unar de nalgadas precedieron a varias embestidas para luego sacarlo y dejar que elnsiguiente hiciera lo mismo. El chico mamaba el pene de otro hombre negro, este le cogía la cabeza para que se metiera todo el miembro y mover las caderas para que entrara y saliera. Saúl se ahogaba, la saliva salía de su boca en variós hilos. Llegó otro hombre e hizo lo mismo pero esta vez El chico vomitó al ahogarse. Recibió una fuerte cachetada. –¡Puta!. -Llegó otro hombre para que se lo mamara.

Detrás de Saúl llegaba el cuarto hombre pero la cola se extendió, habían más hombres esperando turno para penetrar al invitado especial de la noche. Uno detrás de otro penetraban al chico. Entre cinco y seis empujones y le tocaba al siguiente, esos mismos se ponían en la cola para que se lo mamara Saúl que volvieron a darle popper

Ocho hombre ya lo habían penetrado y por lo menos 10 habían probado como el chico mamaba.

Llegaba el décimo y con él se acercó otro para abrirle bien las nalgas al chico. –Dale duro que este ya no siente de tanta driga que tiene encima. -La.mirada de Saúlnestaba perdida, sus ojos vidriosos, solo sonreía sin sentir dolor.

Cuando el chico ya iba por el décimo quinto hombre que lo penetraba y una veintena para mamarlo, hubo un instante que nadie estaba haciéndole nada. Saúl le temblaba el cuerpo y se cayó al piso. –Cárgalo.

–Vamos a llevarlo a un cuarto.

–No vale, móntalo en uno de los columpios y ahí seguimos. ¿Verdad que tú quieres seguir llevando palo? -Saúl vio al hombre con sus ojos como si fuera a llorar y movió la cabeza diciendo que sí. Lo montaron en el columpio de cuero. El chico era un trapo. Le sujetaron las piernas para que su culo quedara expuesto hacia los hombres. –Coño mira a ese lo que le están haciendo.

–A este ya le cabe cualquier cosa, ahora jugamos con él a lo mismo.

Aitor, montado en el columpio con sus piernas levantadas y sujetadas a unas tiras de cuero, estaba totalmente drogado, su mirada perdida y sus movimientos eran descoordinados. Frente a él un hombresentado en una silla y con un enorme guante en su brazo lleno de una grasa blanca, tenía la mitad de su brazo dentro del culo del muchacho. Aitor le mamaba el pene a otro hombre, la saliva se escurría por la comisura de sus labios, se escuchaba unos vagos quejidos por parte de Aitor.

El hombre metió todo su brazo, lentamente lo fue sacanado. El culo de Aitor estaba dilatado parecía un brócoli rojo, cualquier cosa que le introdujeran en ese momento entraba sin dificultad. Otro hombre se sentó a hacer lo mismo. Sin ponerse guante se  colocó aquella grasa blanca en ambas manos y brazos. Juntó sus manos con los dedos extendidos y comenzo a penetrar el culo metiendo ambas manos y seguir penetrando.

–Verga marico, eres un maldito, vas a destrozarlo.

–¿Es amigo tuyo? Deja que aguante, a eso vino. Cuando sus dos manos entraron y el seguía empujando, Aitor gritaba con un sonido ahogado. –Métele el guevo pa que no grite la loca. Sus antebrazos estaban dentro.

–Mira, mira lo que voy a hacer, esto va a poner a chillar al pana. -El hombre separó sus brazos abriendo aún más el culonde Aitor, esta vez los gritos eran más fuertes. Dos tipos le metieron sus penes en la boca. El hombre sacó sus brazos. Aitor evacuó y comenzó a temblar.

–Coño que asco. Este pana le metió el brazo hasta el hombro y a mi me caga.

–Le aflojó el barro, te tocó el regaloto a ti. -El hombre se quitó el exceso de los restos fecales en el cuerpo de Aitor, todos se fueron de ahí dejando solo al muchacho tendido en el columpio.

Guillermo estaba tumbado en un sofá besándose con Reddy mientras un hombre le metía los dedos por el culo. Guillermo se movió sin dejar de besar a Reddy y el hombre lo penetró. Hubo un quejido.

–¿Vas a chillar después que te metiste la verga de Antonio?.

–Me duele todo. 

–Ahora vamos al columpio para hacerte un fisting.

–Aaau, ¿que es eso?

–Meterte todo esto. -Reddy puso su mano en el hombro señalando todo lo que le iba a introducir en el culo.

–Estás loco marico. Ni drogado me vas a meter el brazo.

–Drogado es que vas a montarte ahí para hacertelo, vamos, vente Paolo, te lo coges en el columpio.

Mientras caminaban hacia los columpios, veían a los hombres teniendo sexo con todos, las dos mujeres eran penetradas por varios e igual hacían sexo oral.

Saúl se había bajado del columpio y se estaba orinando. Reddy le dio una cachetada. –¿No puedes aguantar e ir al baño?

–Me acaban de meter un brazo por el culo marico, estoy...-el chico se desplomó en el piso y Reddy siguió de largo.

–Coño aquí huele a mierda.

–¡Es Aitor! ¡Aitor, Aitor! Vamos a bajarlo.

–Esta lleno de mierda.

–No lo vamos a dejar ahí. -Guillermo lo desamarró y lo bajó al piso, el olor era asqueroso y le dio una arcada.

–Móntate en este.

–No ne vayas a meter el brazo, ni siquiera la mano.

–Coño cállate, viniste a tener sexo, ¿O tú viniste a hacer el amor románticamente?

¡Hey, vengan, vamos a cogernos a este.

Luego que Saúl despertó, despues de un oar de horas dormido en el piso, varios hombres lo agarraron para seguir cogiéndolo. Eran 12 tipos. Luego que todos lo habian penetrado, el chico se sentó en el piso y los 12 tipos más otros que se acercaron lo rodearon y se masturbaban, el chico esperan con su boca abierta el semen de todos esos hombres.

Cinco de ellos eyacularon a la vez, el semen caía en los hombros, cabello y cara del chico, luego otros dos y así iba cayendo chooros del líquido blanco por todo su cuerpo. Al finalizar uno de los hombres le quitaba el semen de los ijos connsu dedo mientras Saúl mamaba el pene de varios. Su cuerpo estaba casi cubierto de aquel líquido blanco y viscoso. Había un fuerte olor que impregnaba el ambiente.

Guillermo bajó del columpio con calambres en sus puernas luego que seis hombres lo penetraran. Reddy lo sujetó del brazo para llevarlo a un sitio.

–Ya va Reddy coño, déjame descansar, mariconme han cogido más de lo que habria querido, quiero cogerme a alguien no joda, a una jeva, pero quiero descansar.

–Te voy a llevar a tomar un trago, busquemos a tu amiguito.

–Saul no debe valer nada, el pobre se lo han covido casi que todos.

–A eso vino para ser la mascotas de estos machos. Para eo le voy a pagar a su papáuna buena plata.

Seis de la tarde del día siguiente...

Guillermo, Aitor y tres hombres más, desnudos en una cama king. Estaban dormidos. De repente suena el motor de un carro y Guillermo abre los ojos.

Se levanta y ve a los hombres, ambis tenían unos penes grandes. –Seguro que estos dos nos cogieron. Aitor, Aitor, despierta ¿Que hora será? Coño esta atardeciendo. ¡Coño Aitor, párate! -Le dio varios empujones y se despertó igual que uno de lo uno de los hombres. 

–Epa, no te vayas, quiero cogerte.

–Ningún cogertelo, nos tenemos que ir. -Levantó a Aitorby bajaron las escaleras desnudos, en la enorme sala quedaba pocas personas, algunas dormidas otras teniendo sexo, se consiguieron a Saúl que cargaba varias pacas de dólares.

–¿Qué haces?

–Me tengo que ir y no consigo mi ropa y no se donde coño está Reddy.

–Yo te doy la cola, vamos a ver si hay alguna ropa aqui, esta gente ni se acordará.

Se vistieron y salieron al estacionamiento donde estaba el valet oarking, pidieron el carro. Apenas se montó puso a cargar el celular.

–Me duele la cabeza y todo lo que se llama cuerpo. -Decía Aitor recostado en el asiento.

–¿No te va a doler todo? Te cogió un gentio y te metieron un brazo. Y saliste bien porque a este carajito  creo que se lo cogió toda la fiesta. 

Luegonde cinco minutos enciende el celular y entraron cuentos de.mensajes y llamdas perdidas. Llamó a Diego.

–Coño ¿Donde carajo estas? 

–Mierda marico no me grites.

–llamé a la policia y todo.

–Estaba en una fiesta.

–¿Desde ayer en la tarde hasta ahora?

–Si, luego te cuento, me duela la cabeza. ¿Que pasó con esta chama, está...?

–Claudia, Guillermo, Claudia ¿Estás drogado?

–Estoy todo, borracho, drigado, cogido, ¿Como está Claudia y la bebe?

–Guillermo, la bebe es de cualquier persona que se la cogió en Bangkok. La niña ninse oarece a rlla ni a mi, tiene rasgos asiáticos. La muy perra me quería encasquetar la barriga.

–La bebe no es tuya...ella te lo dijo en el carro, pero tu no querías entender.

–¿Ahora que hago?

–Le estás preguntando a la persona menos indicada enneste momento. Yo llego me ducho y me acuesto y mañana te respondo.

–No debí volver con ella y quedarme contigo.

–Jódete.ahora carga con bebe ajeno.