Huevos revueltos. 291

 

–¿De verdad te casaste?

–Si chamo, estoy casado.

–¿Y dónde salió esa mujer y esos dos tipos de allá afuera?

–Un cuento complicado.

–¿Pero esa tipa quién es marico? ¿Es narco o tiene plata de cuna?

–No sé chamo...todo fue tan rápido.

–Yoheny busca este celular que creo que ya está listo. Vamos para acá, es que este tipo que contrataste parece un obsevardor de la ONU que un encargado. Nacho, por lo que veo conoces muy poco a esa mujer, está podrida en plata, te oaga todo, te mudaste, te casas y ahora este local es tuyo. ¿No se te encendieron las alarmas marico?.

–Estoy abrumado con todo, ella me habla y me envuelve. ¿Viste el escolta de pelo negro el papiado?

–Si...

–Carmen lo puso para "complacerme" mientras ella no está. Lo que yo pida y quiera hacer, él estará dispuesto.

–Maaaarico, esa vieja está loca.

–Un poco.

–¿Un poco? Mosca, averigua pana, esta tipa esta metida en algo muy gordo.

–Ya me casé con ella...pero te confieso que el dineral que tiene ella a mi disposición, envicia, lo que pida me lo da.

Los escoltas se pusieron alerta cuando se acercó un muchacho al local.

–Buenos días, ¿se encuentra Ignacio?

–¿Quién lo busca?  -Los escoltas se acercaron, Jorge se puso nervioso.

–Jorge.

–Ya le aviso.

–Nacho, te busca Jorge.

–¿Jorge?

–¿Tu ex?

–Supongo. -Ignacio salió hacia la entrada y le hizo señas a los escoltas para que se alejaran, Jorge no entendía.

–¿Cómo estás chamo? -Se abrazaron.

–Bien, hoy lo tengo libre y tenía que venir para acá y quería saludarte. -Ignacio le tocó el hombro y algo llamó la atención de Jorge.

–Chamo ¿Dónde vives? ¿Ya estás trabajando?

–Si, trabajo en una tienda por departamentos, y vivo cerca de aquí, en una habitación.

–¿En una habitación? 

–Si, quiero de momento ahorrar para mudarme, marico vivo con un actor porno.

–Coño...¿grandote, papiao, pelúo?

–No vale, para nada es un chamito flaquiiito, parece que tuviera 16 añitos y tiene como 21 áños.

–Verga...vamos a tomarnos un café, quiero contarte unas vainas. -Salieronndelnlocal y Gilberto los siguió unos pasos atrás.

–¿Me puedes explicar el guardaespaldas? Marico, tienes un anillo, ¿Te casaste?

Ignacio le contó todo lo que había pasado.

–Marico, ya con solo lo de la capucha para entrar o salir de ese lugar, es que algo turbio hay, obvio que esa tipa es una oesada y no por algo bueno. Tú definitivamente te fundiste el cerebro.

–Te confieso que estoy entre cagado y feliz porque no me tengo que preocupar por el dinero.

–Nacho, sal de ahí mientras puedas, vas a salir jodido.

–Hay otra cosa, este escolta, el que está con nosotros, me lo puso Carmen para cuidarme pero también para que tire conmigo y me lleve y traiga dónde yo quiera, mientras ella no está. Como ahora.

–Coño. Que loca.

–¿Te quieres venir a casa y le damos con Gilberto?

–¿Tú quieres tirar conmigo?

–Un trio. -Jorge se queda pensando. ¿Queda lejos la casa?

–No, pero no sé donde queda y a ti también te pondrán capucha. Voy a llamar a Gilberto.

Gilberto se sentó con ellos. 

–Queremos hacer un trio contigo, para irmos a la casa.

–Conoces las reglas, no pueden entrar extraños a la casona.

–No es un extraño, es amigo mio, mi ex, además le vas a poner capucha. No tenemos que decir nada.

–Hay más gente en la casona que van a ver todo.

–Yo me entiendo luego con Carmen, es un amigo, nadie se va a enterar que nos vas a coger.

Douglas llegaba una horavtarde al gimnasio pues tuvo que arreglar unos asuntos con Castro en la construcción de la nueva torre.

–Hola, disculpa el retraso.

–Ve a cambiarte, yo estoy atendiendo a otra persona pero te doy la rutina y sigues tú.

–¿Estás bien?

–Si, hoy te toca piernas.

–¿Piernas? Coño Leoncio, hoy tengo grabación, ¿Me vas a poner piernas? Por cierto, grabo contigo.

–Si...no queda más remedio, pedí cambio y me gané un regaño. Te sale piernas, cámbiate.

Douglas se fue al vestuario sorprendido por la actitud de Leoncio, aunque se imaginaba la razón.

–¿Estás molesto conmigo que no quieres grabar las escenas?-

–No te tardes Douglas que no hay tiempo.

El ingeniero salió y fue a las máquinas, Leoncio le indicó lo que iba a  hacer y lo dejó solo, a los 20 minutos se acerca.

–¿Todo bien? -Douglas detiene el ejercicio.

–No, quiero que me digas que te pasa conmigo.

–Nada Douglas, tú eres el cliente del gym, yo tu entrenador, tenemos una relación profesional, eso es lo que pasa.

–Ahora en un rato vamos a grabar, ¿Vas a seguir con esa actitud?

–Claro, tenemos otra relacion profesional en la productora, grabamos, tenemos sexo dirigido para que todo quede oerfecto y cada quien por su lado. Haz ahora varias repeticiones pero en esta máquina, luego vuelves a esta.No te enfríes.

Una hora después Douglas se vestía luego de ducharse.

–¿Nos vamos juntos?

–No, me voy en el transporte de la productora, varios nos vamos en el autobus.

–No seas bobo, yo te llevo.

–Tranquilo, ve, yo me voy en el autobus.

Douglas llegó primero y fue a cambiarse e ir a maquillaje. Como David no estaba grabando se puso a hacerle sexo oral para mantenerle la ereccion mientras leía el guión. Leoncio llegó y se tomó media pastilla para tener una erección durante la grabación.

–Doctor, toda esta parte del cuello me duele, hago este movimiento y...aaauu... -El médico le tocó el cuello al paciente.

–Ya, tienes esta zona dura. Desvístase.

–Doctor, pero es el cuello que me duele.

–Lo voy a revisar completo, hay que descartar cualquier cosa. -El médico le pone el estetoscopio en el corazón. Lo deja a un lado y se agacha para palpar los testículos.

–Doctor hay otra zona que se me está poniendo dura.

–Ya veo, habrá que hacer algo. -El médico se introduce el pene en la boca y comiemza a mojarlo con su saliva.

–OK, SIGUE MAMANDO Y VE QUITÁNDOTE LA BATA, LEO, CIERRA LOS OJOS Y MUEVETE COMO SI LO DISFRUTARAS.

–Es que lo estoy disfrutando coño. -Pensaba Leoncio mientras acariciaba la cabeza de Douglas.

Se pone de pie. –Ponte en la camilla que to voy a hacer un tacto. -De pie frente a la camilla, apoya su pecho en ella y Douglas le mete un dedo en el culo, luego dos y los mueve. Los saca y se quita el guante.

–ESTA TOMA SE DIFUMINA, DOUGLAS PENETRALO Y CUANDO LO TENGAS TODO ADENTRO COMENZAMOS A GRABAR DE NUEVO.

Douglas lo penetró y se encendieronnlas camaras, se movía mientras las cámaras laterales y la que estaba en el suelo grababan. 

–LUEGO DE TU TEXTO LE DAS UNAS BUENAS NALGADAS, DURO, AGUANTA UN POCO LEONCIO.

–Ya no te duele el cuello ¿verdad? -Douglas le dio una nalgada, luego otra y vinieron dos más para luego seguir movíendose, Leoncio gemía, veía a Douglas no con morbo, sus ojos lo delataban.

–Este pana esta enamoradito de Douglas mira como lo ve.

–Esas tomas no van. LEONCIO PON CARA DE SUFRIMIENTO, TE ESTÁN DANDO DURO, TIENES CARA RISUEÑA. -Luego de dos minutos grabando en esa postura, se montan en la camilla en posición misionero.

–AHORA LE SIGUES DANDO CON FUERZA Y LO BESAS CON LENGUA, LEONCIO, TU NO TU QUIETO, QUE EL TE BESE, GU ESTÁS SUFRIENDO.

Douglas movía las caderas con fuerza, su oene entraba y salía a toda velocidad, Leoncio gemía, el ingeniero se acerca para besarlo.

–Te amo Douglas. -El hombre lo besa metíendole la lengua y Leoncio ignorando las indicaciones del director también lo besa y coge por la nuca a Douglas y se besan por varios segundos. Se separan a pocos centímetros. 

–Tú me gustas mucho. -Volvieron a besarse.

–¿Bueno y estos pendejos que hacen? -Douglas retira el pene y se acuesta sobre Leoncio y sigue besándolo.

–CORTEEEN.

–Ya va, sigue grabando, que esto sirve para otra cosa. Estos ni se inmutan. -Tadeo se acerca a la camilla y los ve, siguen besándose.

–Ustedes creen que de gobiernan, pueden hacer lo que les de la gana, ¿Qué coño es esto vale?

–Perdón, perdón, nos dejamos llevar.

–Ay ¿No me digas Leo?  Sus relaciones personales me las dejan fuera de la productora. Les recuerdo que si piensan ser moviecitos, uno de los dos se tiene que ir de la productora. Por supuesto Douglas no serás tú.

–Tadeo, esto no va a volver a pasar.

–Claro que no, tenemos que grabar la secuencia como es y luego vas a caja a buscar tu liquidación Leoncio.

–Tadeo, si se va Leoncio, me voy yo también.

–Tu no te puedes ir, eres la estrella.

–Leo y yo no tenemos nada, no somos novios, simplemente nos dio morbo y nos dejamos llevar, no me interesa tener marido. -Leoncio vio a Douglas y su cara se enrrojeció. Salió del set y se fue al baño.

Se aoyó del medon del lavaplatos y miraba al espejo. –El coño de su madre, que guevón eres Leoncio, pensando que Douglas quería algo contigo. -Entró Douglas.

–¿Vienes a reirte de mi o a decirme de nuevo que no quieres nada conmigo? -Douglas se le acercó y lo besó provocando en ambos otra erección.

–Quiero todo contigo pendejo. Pero no quiero que te boten, lo que pasó en el set no debe pasar, hay que mantener esto oculto. Hay que grabar, sal.

Leoncio vio de nuevo al espejo, se sonrió. –Si, eres un pendejo.