Jacinto de pie en la cama con las piernas flexionadas penetraba a Héctor, que no paraba de gemir. Sus manos apretaban las sábanas mientras recibía las embestidas del profesor.
Jacinto retiraba todo el pene y veía el dilatado culo, metía los dedos y volvía a introducir su pene. Hector se masturbaba aunque no conseguía tener una erección. Logró eyacular sobre la cama, gritaba comncada expulsión de semen. Jacinto seguía penetrando al abogado. –Estoy a punto, me vengo. -Le apretó con fuerza las nalgas a Hector y se corrió dentro de él. Se quedó unos segundos aferrado a las caderas de Héctor.
–¿Qué pasó?
–Ya va...estoy cansado...uuuuf...que acabada, hasta mareado estoy. -Retiró el pene y del culo salía gotas de semen que se escurrían por el escroto de Hector y caían a la cama. Se tumbó en la cama, Jacinto hizo lo mismo.
–No me has contado como te ha ido en tu regreso a la universidad.
–Agridulce, aunque dar la clases es mi vida y me alegré al regresar, siento que la gente aun cree que que yo estuve acostándome con alumnos. El ambiente es extraño, pero ansiaba regresar a la docencia.
–Que bueno negro, yo por fin regreso al bufete a tomar las riendas del negocio y reencontrarme con mis clientes y socios.
–¿Te sentirás bien viendo a tu ex?
–Si...tema superado, ahora estoy soltero y quiero seguir así, no me interesa juntarme con nadie.
–Coño...casi un año contigo y hablas de ese modo, solo fui tu enfermero que te cogías de vez en cuando.
–Lamentablemente o afortunadamente es asi negro, ya hablamos de eso coño.
–Entonces yo me voy hoy y ya no nos veremos.
–Yo no he dicho eso Jacinto. Yo lo que no quiero ed tenerte de noviecito.
–Ok, voy a fucharme para irme a la universidad. Te prometo que hoy me llevo mis cosas.
–No te estoy botando tampoco.
–Igual ya no tengo nada que hacer ennesta casa, ya estás bastante recuperado tanto del acv como de lo otro.
–Lo otro, hablas como si fuera algo prohibido. Soy alcohólico negro, dilo. Estoy sano, pero es crónico.
–Lo cierto es que ya estás bien. Ojalá que estando en el bufete te animes y comiences a retomar las riendas.
–Que no te quepa duda.
Guillermo ya estaba en el bufete para esperar la llegada de Héctor. Estaba revisando unas cosas en la computadora mientras firmaba unos documentos. Tocan la puerta. –Pasa.
Aitor abre la puerta y entra. –Buenos días Guillermo, te traigo unas órdenes de compra que tienes que revisar y firmar.
–Dámelas. -Aitor se acerca y Guillermo comienza a revisar. Se concentra en los papeles sin levantar la cabeza, Aitor frente a él se va quitando la ropa, le da la vuelta al escritorio y se pone al lado de la silla. Guillermo al sentir la presencia del muchacho, mueve la cabeza.–¿Qué coño haces?
–Desde que fuimos a la fiesta no me coges.
–¿No te bastó con todos los que te cogieron?
–Quiero que me cojas tú. -Guillermo se puso de pie y se restregó los ojos.
–Aitor, estamos en la oficina y tengo mucho trabajo. -El muchacho se agacha y le baja el cierre del pantalón, mete la mano y saca el y comiemza a mamarlo.
–Rápido chamo.
–Relájate y disfruta. -Aitor se introdujo todo el pene en la boca aún flácido pero sintiendo como crecía dentro de su boca, movía la cbeza mientras mamaba. Guillermo le acariciaba el cabello. Tocan la puerta y abren.
–Hola Guillermo... -Aitor se pone de pie tapándose con las manos, Guillermo se acomoda el pantalón.
–Vaya...¿Y que significa esto? ¿Quién es este?
–¿Qué haces aquí Diego?. -Aitor se colocaba la ropa.
–Soy el asistente del señor Guillermo.
–Lo asistes sexualmente también.
–Aitor, sal de la oficina, no me pases llamadas y que nadie entre al despacho, nadie.
–Ajá ¿Qué pasó?
–¿Qué pasó te digo yo a ti? Ahora tienes una amante.
–Diego, estoy reventado de trabajo y no estoy de humor para tus celos estúpidos.
–¿Reventado de trabajo? Y él te estaba mamando el guevo para relajarte.
–ESE NO ES PEO TUYO COMO COÑO ME RELAJO EN LA OFICINA. ¿A QUÉ VINISTE?
Diego se sentó en la silla y se apoyó en el escritorio.
–No es mi hija, hoy me dieron la prueba de ADN.
–Te lo dije desde el dia del parto, ella te lo dijo pero tú no quisiste pararle bola.
–¿Me puedo quedar en tu apartamento, mientras consigo donde mudarme?
–Yo tambien me voy a mudar para mi apartamento de nuevo y le voy a decir a Aitor que viva conmigo.
–¿Aitor tu asistente? Aaah es que son novios...vaya...¿y yo?
–Si quieres vivir con nosotros eres bienvenido, colaboras con los gastos y punto.
–¿Y nos coges a los dos?
–Eso es lo que te preocupa, que te coja.
–Que me dejes guindando tú también.
–Deja el drama, ¿Vas a dejar sola a Claudia?
–Por puta.
–Puta no Diego, la secuestraron y la pusieron a prostituirse en contra de su voluntad, en tal caso mentirosa.
–Lo que sea, no quiero vivir con ella, quiero estar con un hombre, contigo.
Héctor entraba al bufete con su bastón, los abogados le aplaudieron, salieron Jaime, Guillermo y Oto para darle la bienvenida. Los abogados lo saludaron estrechando la mano, sus socios lo abrazaron y Oto también, aunque Héctor se mantuvo abrazado unos segundo más con él. Se separaron. Bebieron una copa de champaña, Héctor bebió una Coca Cola.
–Tu abogada está de post parto, regresará contigo ennunos meses, yo tengo un asitente..
–Han cambiado las cosas aqui.
–Hector, pasa por mi despacho para hablar contigo. Oto, quiero hablar con él a solas.
–Tranquilo, igual estaba esperando que llegara Héctor para irme a reunir con unos clientes.
–Vaya, el bufete ha crecido mientras yo estaba de año sabático.
–Asi es, esto no se ha detenido. Afortunadamente hemos crecido y tuvimos que contratar más abogados.
–Cuéntame, ¿De que quieres hablar?
–Mi matrimonio está mal.
–El carajito te montó los cachos. Eso se veía venir Jaime.
–No, para nada. Se los monté yo. En la cama no se me para con Oto y...
–Ya va, ya va, ¿Yo para que quiero esa información?
–Déjame hablar. He estado con otros hombres y mis erecciones son perfectas, amo a Oto pero algo pasa.
–¿Quieres que te de un consejo?
–Quiero acostarme contigo.
–A mi si que no se.me para, estas y estoy jodido.
–Te cojo yo a ti. ¿Quieres, estás dispuesto?
–¿Por que yo Jaime? Eres el hombre que me quitó el amor de mi vida.
–Porque a pesar de todo eres mi amigo.
–¿El carajito lo sabe?
–No...que ni se entere, quiero demostrarme algo, ver que pasa, con el he hacho trios y ha sido perfecto.
–¿Para que quieres acostarte conmigo entonces?
–Eres como mi hermano, quiero comprobar si tengo una ereccion con alguien cercano a mi, por qué solo con Oto no funciono.
–¿No es más fácil ir con un especialista?
–Me tiene aburrido los sexologos, urologos y toda esa gente.
–Pon la fecha y nos acostamos. Voy a mi despacho a ponerme al día.
–Llama a Reddy que anda desesperado desde que se enteró que regresabas.
Dos horas después...
–Oto entraba al despacho de Hector a entregarle unas carpetas, eete se levanta. –No te vayas, ven acá.
–¿Que quieres Hector? -Se acerca al chico, le pone la mano en la nuca, le acerca la cara a la suya y lo besa apasionadamente. Se separa a centímetros de él.
–Ya no te voy a poder coger porque no se me para pero créeme que voy a estar cerca de ti, cerca carajito, voy a ser tu sombra.
–¿De qué coño hablas?
–Yo me entiendo, yo me entiendo.
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